La solución más sencilla es que no debes usar Word para redactar tu correo electrónico. Utiliza Apple Mail, o Outlook:Mac, o cualquiera que sea tu programa de correo electrónico.
¿Por qué?
- El correo electrónico está formateado con HTML. Word produce un HTML muy malo que es muy probable que no se vea como usted quiere, especialmente cuando lo envía a otra persona.
- Hay dos formas de mostrar el tamaño de las fuentes: en puntos y en píxeles. El mundo se ha decantado mayoritariamente por los puntos para especificar el tamaño de las fuentes. Si ves que hay una gran diferencia en el tamaño de la fuente cuando alguien responde a tu correo, es porque su programa de correo piensa que tu tamaño de fuente estaba en puntos cuando en realidad estaba en píxeles (o al revés).
Si usas Word porque realmente quieres un formato específico que es posible en Word pero que no puedes hacer al intentar darle ese formato en tu aplicación de correo electrónico, esto probablemente significa que el formato que quieres usar no es apropiado para el correo electrónico. O bien utilizas un formato apropiado para el correo electrónico (que no va más allá de elegir entre un puñado de fuentes y tamaños de letra, así como algunos formatos básicos como listas con viñetas y negrita/cursiva), o bien envías tu artículo con mucho formato como un archivo adjunto (ya sea un documento de Word, si estás seguro de que tu destinatario tiene Word, o un PDF).