Por lo tanto, asumo que no quieres usar sólo una aplicación, sino que quieres hacer algunas pruebas en la vida real.
Sin embargo, la única manera de hacerlo y de garantizar un cierto grado de precisión es asegurar:
- que tengas exactamente las mismas aplicaciones funcionando durante estas pruebas
- todas las aplicaciones (y el propio iOS) deben ser de la misma versión
- las horas de inicio y fin (y por tanto también la duración) son idénticas 1
- la temperatura ambiente en ese momento era idéntica (en otras palabras, tendría que hacerlo en el mismo ambiente con aire acondicionado y a la misma temperatura)
En pocas palabras, lo que hay que hacer es algo como lo siguiente:
- Cargue completamente ambos iPhones y desconéctelos de la corriente eléctrica a las 10 de la noche
- A las 8 de la mañana reproduce la misma película a todo volumen y con el brillo al máximo en ambos iPhones
- Al finalizar la película, anota el porcentaje de batería
- Reproducir la película de nuevo (todavía con el volumen y el brillo al máximo)
- Al terminar la película, vuelve a anotar el porcentaje de la batería
- Reproducir la película de nuevo (todavía con el volumen y el brillo al máximo)
- Al terminar la película, vuelve a anotar el porcentaje de la batería
- Vuelve a reproducir la película (todavía con el volumen y el brillo al máximo)
- Al terminar la película, vuelve a anotar el porcentaje de la batería (suponiendo que aún tenga carga)
Ahora cargue completamente ambos iPhones y déjelos conectados a la corriente eléctrica hasta las 8 de la mañana del día siguiente, momento en el que los desconectará de la corriente y realizará la misma prueba (es decir, la misma habitación, la misma película, el mismo volumen, el mismo brillo, etc.).
NOTA: Lo anterior escenario de prueba es sólo un caso de ejemplo de cómo podrías probar ambos iPhones. La idea del escenario que esbozo arriba es sólo para entender cómo se llevaría a cabo una prueba de ambos iPhones para asegurar cierta validez a los resultados. O, por decirlo de otra manera, para asegurar que estás comparando Manzanas con manzanas (sí, juego de palabras). Además, uno de los otros factores que hay que tener en cuenta es el uso real del teléfono durante la prueba: para garantizar una comparación válida habría que tener el teléfono apagado.
Independientemente del escenario de prueba que adoptes, compara las diferencias en los porcentajes de batería (y también si un teléfono funciona más tiempo en las mismas condiciones) para determinar si la batería de 10 dólares merece la pena.
1 En realidad, si bien las horas de inicio deben ser idénticas, la hora de finalización no tiene por qué serlo (y por tanto tampoco la duración). De este modo, puedes tomar nota de si un teléfono puede soportar tu escenario de prueba durante más tiempo que el otro y, si es así, durante cuánto tiempo. Por ejemplo, en mi escenario, ¿puede un teléfono reproducir la película 4 veces completas? ¿Pueden hacerlo ambos? Continúa para ver si uno de ellos puede seguir reproduciendo la película durante más tiempo y, si es así, durante cuánto tiempo.
En pocas palabras, sólo usted puede decidir, basándose en los resultados de sus pruebas, si merece la pena cambiar también la batería.