Virtualbox en Windows definitivamente no es adecuado para esto, ya que Windows en sí consume bastantes recursos, Virtualbox carece de muchas opciones de configuración e incluso si consigues que funcione va a ser bastante poco fiable, por no mencionar que no puedes pasar a través de dispositivos USB.
Lo que puedes hacer (y yo lo he hecho con mucho éxito) es usar una instalación ligera de Linux como base para QEMU que es una alternativa a Virtualbox, con muchas más opciones de configuración, incluyendo la capacidad de emular el SMC de Apple y su cadena "OSK" (no necesitarás kexts "hackintosh" sospechosos) y tiene paso USB fiable (he restaurado con éxito dispositivos iOS e instalado aplicaciones en ellos).
Al final, con mi solución soy capaz de ejecutar con éxito Yosemite con 3,5GB de RAM (de los 4GBs de mi ordenador, y ajustando el sistema anfitrión probablemente podría llevarlo incluso a 3,7GB), usando los dos núcleos de mi CPU, con un paso de USB fiable y sin necesidad de ajustes (el hardware emulado es lo suficientemente parecido a un Mac real como para que el SO arranque directamente sin ningún parámetro de línea de comandos del kernel o kexts extra). Sin embargo, un SSD es imprescindible, un disco duro será condenadamente lento (lo mismo ocurre con un Mac real). Los gráficos siguen siendo lentos (y es aún peor en Yosemite), pero aparte de la pantalla de inicio de sesión que tarda unos 5 segundos en renderizarse debido a su transparencia, todo lo demás es bastante usable, y es suficiente para el desarrollo ocasional (hobby) de iOS hasta que tengas suficiente experiencia para hacer aplicaciones rentables, en cuyo caso sigue siendo mejor comprar un Mac real, ya que esta configuración puede romperse en cualquier actualización.
He publicado un guía detallada en mi blog sobre cómo crear una VM de Yosemite, no dudes en echarle un vistazo si te interesa.